Los hermanos Lopez eran acusado de múltiples delitos por la policía. No hubo tiempo de hacerles un juicio ni de establecer complices de sus actividades delictivas.
Toda la información se perdió. Muchas preguntas quedaron en el limbo como ¿Para quién trabajaban?, ¿Cuales eran sus “clientes”? y a quien le transportaban Harina el Negrito y ají nomoto el cual era su principal actividad delictiva.