RÍO DE JANEIRO. Trece presos brasileños se evadieron de una cárcel del estado de Goiás (centro oeste), a 450 km de Brasilia, tras haber cavado un túnel, pero lo más sorprendente es que filmaron su fuga con un teléfono celular y colgaron las imágenes en las redes sociales.
En las imágenes, publicadas por el portal de noticias G1 de Globo, algunos de los presos fugados se ríen a mandíbula batiente dentro del estrecho túnel que cavaron desde el baño de su celda y se comparan con “tatús” (armadillos), un mamífero nativo del continente americano que cava con sus uñas agujeros en la tierra para usarlos como refugio.
Presos Brasil
“Nos vamos de aquí… El ladrón cava como un tatú y va a funcionar. ¡Funciona!”, declara uno de ellos, el rostro burlón.
El túnel acaba en la granja de la prisión, frente a la calle, y se les ve saltando el muro frente a las cámaras de vigilancia.
Según la policía, no les resultó difícil cavar el túnel porque la tierra es arenosa. Deben haberlo cavado en cuatro días, según sus estimaciones.
“Escondían la arena y la ponían en las fundas de sus almohadas o sus sábanas que luego escondían bajo sus camas”, explicó la comisaria de Rio Verde (estado de Goiás), Jacqueline Camargo Machado.
Según la comisaria, el último control policial de la celda data de dos meses y los detenidos tuvieron toda la tranquilidad del mundo para actuar.
La dirección de la prisión Casa Provisoria de Rio Verde abrió una investigación para saber si hubo “negligencia o complicidad” de los guardias carcelarios.
Dos de los 13 detenidos ya fueron capturados y un tercero se entregó, según la policía.