El expresidente Hipólito Mejía advirtió este martes que la sentencia del Tribunal Constitucional (TC), que niega la nacionalidad a los hijos de extranjeros que viven irregularmente en la República Dominicana, tiene implicaciones legales, políticas y sociales que afectan a los inmigrantes que residen en el país.
El exjefe de Estado dijo, sin embargo, que por la complejidad jurídica de la sentencia, "sus visos de retroactividad, su particular interpretación del tránsito humano y los conceptos que contiene acerca de la legalidad de los migrantes", decidió formar una comisión de juristas que estudie el fallo para posteriormente fijar su posición definitiva sobre los aspectos legales de la misma.
“Como país debemos actuar de acuerdo con nuestra Constitución y al mismo tiempo en consonancia con las normas internacionales que regulan el tema de la migración", consideró Mejía en un comunicado enviado a los medios.
Asimismo, recordó que cientos de miles de dominicanos "han decidido emigrar en busca de un mejor destino, así como ciudadanos de otras partes del mundo han llegado a nuestro país en busca de hacer realidad sus sueños".
El exgobernante recordó que fue en su gestión (2000-2004), que se promovió la Ley de Migración que regularizaba, de manera muy especial, a los haitianos.
Sin embargo, sostuvo que los gobiernos que los posteriores gobiernos del PLD, "han mantenido engavetado ese reglamento, lo cual ha contribuido al desorden existente en esa materia".
El exmandatario expresó que "en el contexto de la política internacional y los esquemas regionales de integración que impone la globalización social y económica, las migraciones deben abordarse como un elemento que promueva el desarrollo, en lugar de verse como un fenómeno que contribuye al retroceso de los pueblos".
Concluyó Mejía argumentando que "si por alguna razón se pretendiera con esta sentencia cuestionar la legítima nacionalidad de nuestro inolvidable y querido líder, doctor José Francisco Peña Gómez, nuestra posición inequívoca, al respecto, es que ese hijo de la patria tenía los atributos legales y morales, en su más alta expresión para que todos podamos sentirnos orgullosos de que él naciera y muriera en la República Dominicana”.