Y aparte de esa cantidad por el acuerdo con el ministerio de Educación es posible que el 2 por ciento del 4 por ciento del Producto Interno Bruto asignado para la educación de todos los estudiantes dominicanos vaya a parar a manos de los colegios católicos.
Sin importar el decrecimiento que ha tenido la Iglesia Católica Romana, se va a quedar con el presupuesto de la educación dominicana en sus manos, penalizando a los evangelicos y protestantes que en sus distintas denominaciones superan la membresía católica.
Ahora los evangelicos piden ser incluidos en el pastel y están pidiendo que todos los pastores y sus invitados internacionales sean subvencionados por El estado.
Sin contar que los profesores de los colegios evangelicos también son pagados por el Estado.
Lo peor de todo este “financiericidio” es que el déficit de nuestro presupuesto ronda los 173,000 millones de pesos.
Las consecuencias de este asalto a nuestro presupuesto es que la comida está más cara y se reduce todo el pueblo a la pobreza.
Y como siempre las quejas de los nones (no religiosos), que ya somos el 18 por cientos de este país.
Nuestras quejas de que no se subvencione la fe de nadie cae en el vacío.
Los políticos y las religiones, que ya no se distinguen ni uno ni el otro, se distribuyen la esperanza de una vida mejor para todo pueblo dominicano.
Pero señores alguien me puede decir que han hecho las religiones para que este país se sacrifique tanto por ellas.--- Fuente:
Por Quilvio Vasquez
Presidente Asociacion Ateos Dominicanos (Ateodom)
