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lunes, 2 de noviembre de 2015

La Marina calla ante fuga pilotos

La Armada Dominicana, responsable de custodiar las aguas territoriales, las costas del país y autorizar la entrada y salida de embarcaciones, mantiene un hermético silencio en torno a la fuga en alta mar de los dos pilotos franceses condenados a 20 años de prisión por narcotráfico que habrían zarpado el domingo 18 de octubre de la zona de Samaná.



La armada tiene por norma que ninguna embarcación sale mar afuera sin la autorización de la comandancia de puerto correspondiente.

En la autorización de navegación se registra la matrícula, fecha, hora, número de tripulantes, destino y el nombre de la embarcación. El Nacional ha insistido con la Armada Dominicana, con el interés de obtener la versión oficial para informar a sus lectores el lugar, hora y fecha precisas.

Reporteros se han trasladado hasta la Base Naval 27 de Febrero en la búsqueda de información oficial del contralmirante Edmundo N. Félix Pimentel.

Los pescadores que diariamente se buscan la vida en alta mar en una yola o un bote a pescar sino tienen la autorización de la comandancia de puerto o el guardacosta no pueden salir a ganarse el sustento diario para mantener su familia.

Sin embargo la autoridad responsable de esos controles nada ha dicho de la fuga de los pilotos Bruno Armand Odos y Pascal Jean Fauret, quienes difundieron fotografías de su trayectoria en alta mar, sin que hasta el momento la Armada Dominicana haya explicado al país de donde salieron, el tipo de embarcación y quien autorizó su salida.

La huida de los pilotos estuvo también organizada que el trasbordo se produjo en aguas internacionales con destino a territorio francés en las islas caribeñas San Martin y Martinica, desde donde abordaron sendos aviones que lo transportaron a Francia.

En áreas costeras la Armada Dominicana tiene un oficial asignado que vigila la zona y debe estar pendiente a la entrada y salida de cada embarcación.

Ahora el francés Alain Maec Paul Marie Castany, también condenado a 20 años de cárcel por narcotráfico junto a los dos pilotos que huyeron a Francia, y a Nicolás Christopher Pisapia, pedirá a las autoridades su repatriación por estar convaleciente de un accidente de tránsito, dijo su abogada.

“Estaríamos apelando en algún momento a alguna repatriación para que él pueda sanar. Es una recomendación que hace su médico”, afirmó la abogada Luz Díaz.

Díaz desligó a Castany de la huida a Francia, el pasado fin de semana, de los pilotos Bruno Odos y Pascal Fauret, acción que calificó de “irresponsable”.

“Lo que esperamos es que no perjudique al señor Castany, porque ahora podría el Estado querer solicitar un cambio de la medida de coerción”, dijo.

“El escape debe ser juzgado como es, como un acto individual, irresponsable, de parte de los pilotos”. Castany fue identificado como ayudante de vuelo del avión Falcon 50, detenido el 19 de marzo de 2013 cuando se preparaba para volar a Saint-Tropez, Francia, con 26 maletas a bordo que contenían 693 kilos de cocaína.

Los franceses estaban en libertad condicional con impedimento de salida, mientras que será este lunes cuando será remitido el expediente a la Cámara Penal de la Corte de Apelación del Distrito Nacional.

El 13 de octubre, Castany, de 67 años, fue atropellado cuando cruzaba la avenida George Washington, en El Malecón de Santo Domingo, cuando el conductor de una motocicleta violó la luz roja del semáforo.

La Cámara Penal de la Corte de Apelación cuando sea apoderada del expediente asignará una sala para conocer de la apelación del proceso que todos los acusados recurrieron en apelación.

Expertos consideran que las autoridades dominicanas deben procurar abrir un proceso en Francia a los dos pilotos como lo hizo en Polonia con el Padre Gil y el exnuncio apostólico de su Santidad, Jozef Wesolowski, que fueron procesados por el hecho cometido en República Dominicana.
El país ha entregado en otras ocasiones a franceses que han delinquido en República Dominicana para que cumplan condena en ese territorio europeo.

El convenio suscrito entre República Dominicana y Francia para que los nacionales de uno y otro Estado puedan cumplir en su propio país las penas que se les haya impuesto, ese acuerdo fue establecido en enero del 2010.

La transferencia de personas está subordinada al acuerdo entre Francia y República Dominicana, y a que los delitos por los que hayan sido condenados lo sean también en el país en que irían a cumplir la pena.

Para ser posible la transferencia de un francés condenado en la República Dominicana o de un dominicano sentenciado en Francia, el interesado debe formalizar una demanda cuando le queden como mínimo seis meses de pena por purgar.

UN APUNTE

Condenadas aquí y cumplen allá

Francia y República Dominicana tienen un convenio sobre ayuda judicial penal desde 1999 y otro relativo a la extradición desde el 2000. Sin embargo, Francia ha dejado claro que no entrega sus nacionales.
Celine Faye y Sarah Zaknoun, dos francesas que purgaban una sentencia de ocho años en una cárcel dominicana desde 2008 por drogas, fueron enviadas a su país para terminar de cumplir la pena. El caso cobró notoriedad al dirigir ellas una carta el año pasado a la entonces primera dama francesa, Carla Bruni, haciendo una petición en ese sentido.