La fiscalía de Hato Mayor rescató a cuatro niños que vivían en condiciones infrahumanas junto a su padre, el cual según los vecinos los ponía a oler cemento y thinner.
De acuerdo con las denuncias de los vecinos, los pequeños con edades entre tres y once años, pasaban largas horas encerrados en una casa del sector de Villa Vilorio, al norte de esta ciudad, sin ingerir alimentos, pero inhalando thinner y cemento como suele hacer su padre.
Tras ser rescatados los niños fueron llevados a una casa albergue que dirige la Iglesia Centro Cristiano Shalom en esta ciudad y posteriormente fueron trasladados al Consejo Nacional para la Niñez y la Adolescencia (CONANI), que funciona en San Pedro de Macorís.