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sábado, 14 de noviembre de 2015

Advierten el poco ejercicio del cerebro por uso excesivo de tecnología genera alzhéimer severo

EL NUEVO DIARIO, SANTO DOMINGO- El neurólogo José Silié Ruiz advirtió que el poco ejercicio del cerebro, producto del uso excesivo de la tecnología, que ya dificulta hasta memorizar un número telefónico de un familiar, puede generar alzhéimer más severos y a menos edad.



 También alertó por la cantidad de derrame cerebral que se están produciendo en jóvenes, lo cual atribuyó al uso de drogas, alcohol, estimulantes sexuales, energizantes, exceso de horas en fiestas y falta de sueño.

 “Droga, alcohol, todo en exceso, indudablemente que el organismo cobra el precio”, dijo el reconocido medico en el programa Aquí es la Noticia que se transmite por el canal 25 los domingos a la 9:00 de la noche bajo la dirección y conducción de Fernando Quiroz, la conducción de Iranna Flavia Luciano, y la producción de Ingrid Cruz Espinal.

 El descuido con la presión arterial, dijo, es uno de los factores de riesgo en los casos de accidentes cerebro vascular.

 “Por ahí andan miles de dominicanos que nunca se han chequeado la presión arterial”, indicó, tras rechazar el argumento de muchos de que no asisten al médico porque no le duele la cabeza o están muy jóvenes.

 Resume, que a consecuencia de la vida moderna, las personas pagan un alto precio por la comodidad, con estrés, problemas cardiacos y derrames cerebrales.

 “El estrés es necesario. Una pequeña dosis es lo que nos permite la acción, estar activos. Pero el estrés es mediado por una serie de sustancias que el cerebro envía al torrente sanguíneo, y como es abierto, usted no puede decir ‘yo me voy a estresar de 8:00 a 10:00 de la noche’”, expreso. Explica que un estrés producido a las 8:00 de noche aun después de la 11:00 de la noche, la persona durmiendo, está impactada porque circula en su cerebro esa cantidad de sustancia.

 Expuso que cuando se está sometido a un fuerte estado de estrés la persona no siente ni gripe, pero que cuando acaba esa situación comienzan los dolores de cabeza, de cuello, estómago. El organismo le cobra el precio por los excesos.

 Puso como ejemplo que abundan los jóvenes entre 20 y 30 años que expresan sus deseos de ser ricos rápidamente sin trabajar. Desean un carro nuevo o un apartamento, y cuando no lo pueden lograr sufre y se angustian. Ese es un estrés generado por el deseo desmedido por lo material.

 “No le gusta subir por escaleras, sino por ascensor. Quieren llegar de cero a cien, sin pasar por 80 ni 90”.