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miércoles, 28 de octubre de 2015

Frenar violencia intrafamiliar conlleva cambio de cultura

La violencia intrafamiliar y contra las mujeres es un problema muy complejo, causado principalmente por patrones socioculturales, económicos y educativos, que van reproduciendo valores, actitudes y costumbres que se mantienen generación tras generación en la mayoría de los países del mundo, principalmente en nuestra región. Su erradicación no es sencilla, pues depende en gran parte de un cambio completo de cultura.
 
Así lo considera el coronel Ubiratan Ángelo, de la organización no gubernamental “Viva Río”, Brasil, quien atribuye el aumento de la violencia de género a que cada día las mujeres se posicionan más y ocupan cargos importantes dentro de la sociedad y ese escenario, aunque es bueno, los hombres no asimilan la auto dependencia de las féminas.
 
“Ahora ellas trabajan y al igual que los hombres llevan el sustento al hogar, pues tienen argumentos y les resulta más fácil acabar una relación, y eso los hombres no lo han entendido”, indicó.
 
De acuerdo al especializado, en el caso de su natal Brasil, las características de los feminicidios son generalmente causados por hombres, jóvenes, pobres y de color.
 
Otra problemática que cita el experto brasileño y que sucede a nivel mundial es el incremento de asesinatos que involucran armas de fuegos. La cifra de homicidios general es alta y  el porcentaje de las que se llevan a cabo bajo esa modalidad ha aumentado, situación que se refleja en las ventas de estos artefactos y los permisos para su uso.
 
¿Pero por qué los agresores prefieren usar pistolas que armas blancas? Se preguntó el analista, para entonces contestar, “por varias razones relacionadas a la modernidad, rapidez, falsa sensación de auto defensa y alucinación de poder, entre otras”.
 
En el caso de homicidios a mujeres que involucran agentes policiales, Ángelo lo atribuye a los niveles de estrés policial que hace que en el momento que estos llegan a sus casas quieran descargar con todo lo que le rodea.
 
Para el brasileño, la problemática de violencia de género ha llegado a unos niveles preocupantes, por lo cual su erradicación no será tarea fácil, ya que conlleva un esfuerzo sostenido de políticas públicas, educación y concientización de la población, empezando desde la infancia.
 
Algunas estadísticas
Hasta la fecha la Procuraduría General de la República no cuenta con las estadísticas oficiales actualizadas sobre ese delito durante el año 2015. De acuerdo a esa entidad se esperan los reportes de la Policía Nacional y del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif), para hacer un cruce de información.
 
El 2014 finalizó con 88 asesinatos de mujeres a manos de sus parejas o exparejas, 17 más que en 2013, cuando hubo 71. Durante el 2013 y el 2014 se reportó la menor cantidad de casos de los últimos 10 años, a partir de 2005.
 
Primeras víctimas en 2015
La primera víctima de feminicidios de 2015 fue Elis Mariana Díaz, de 32 años, asesinada de 12 puñaladas por su pareja, José Manuel Severino Carvajal, en un hecho ocurrido el 2 de enero en el sector Los Mina, Santo Domingo Este. Ese mismo mes fue ultimada Glenis Pinales Thomas, de 21 años, en San Pedro de Macorís. Esta se sumó a la muerte en enero de Sharleny Díaz, de 22 años, en Higüey.
 
Otro homicidio ocurrió el 15 de enero en el paraje San Gerónimo, de La Vega, siendo la víctima Josefina Durán, de 59 años. Dos días después, en Los Alcarrizos, Santo Domingo Oeste, cayó Rosalía Troncoso, de 30 años, ahorcada por su esposo. Una semana después, en ese mismo municipio, ocurrió el feminicidio de Gladys Sánchez.
 
El coronel Ubiratan Ángelo dio su parecer sobre el tema al término de una charla taller sobre políticas públicas de seguridad ciudadana aplicadas en América Latina, tema central del encuentro que se llevó a cabo del 21 al 23 de octubre en Funglode, con la participación de especialistas nacionales e internacionales.
 
En la actividad efectuada en la sede de Funglode expusieron Alexander Alleyne, coordinador del Observatorio de Seguridad Ciudadana de Panamá; el coronel Ubiratan Ángelo, de “Viva Rio”, Brasil; Marcelo Sergio Bergman, director del Centro de Estudios Raúl Benítez-Manaut, profesor–investigador del Centro de Investigación sobre América del Norte de la Universidad Nacional Autónoma de México; Dennis Kenney, profesor del John Jay College, Estados Unidos; y Julio Rosenblatt, ex jefe de la sección de políticas públicas de seguridad de la OEA, Uruguay.
 
Además el grupo de panelistas locales, integrados por Moraima Díaz, coordinadora del Observatorio Ciudadano del Ayuntamiento Distrito Nacional (ADN); Washington González Nina, viceministro de Interior y Policía; Servio Tulio Castaños, director ejecutivo de la Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus); Alejandrina Germán Mejía, titular del Ministerio de la Mujer y Teresa Martínez, generala de la Policía Nacional.
 
También, Samuel De Moya III, presidente del Laboratorio Balístico y Biométrico del Sistema Nacional de Armas; Dalvert A. Polanco Arias, de la dirección de Sistema Nacional de Emergencias 911; y Rafael Guillermo Guzmán Fermín, exjefe de la Policía Nacional.
 
Entre los aspectos abordados por los expertos, figuran los observatorios de seguridad ciudadana, la importancia de los observatorios para la aplicación de políticas, la educación de los servidores públicos como política pública de seguridad ciudadana, las reformas policiales, la violencia armada, las mujeres víctimas de la violencia, así como los sistemas de emergencias y seguridad.