“El nerviosismo por China es malo para la bolsa, pero es aún peor para el mercado petrolero mundial”, dijo John Kilduff, de la firma Again Capital. Los mercados mundiales sufrieron, este lunes, una de sus peores jornadas desde la crisis de 2008. Como fichas de dominó, cayeron las bolsas de Asia y Europa, luego de que la Bolsa de Shangai perdiera un 8,5 por ciento. Las plazas americanas operaban a la baja.
Tanto el mercado accionario como el de materias primas están asustados por los síntomas de debilitamiento de China, la segunda economía mundial y también el segundo mayor consumidor de petróleo, después de Estados Unidos.
El centro del problema en lo que concierne al petróleo y otras materias primas es que “el país más importante para la demanda muestra reales signos de debilidad”, dijo Kilduff, quien al igual que otros analistas considera que el petróleo puede seguir bajando.
“Los mercados del petróleo están prolongando su caída de precios de la semana pasada al igual que los mercados bursátiles este lunes, mientras crece la inquietud por el enlentecimiento del crecimiento de China”, dijo Tim Evans, analista de la firma Citi Futures.
“La caída de precios está despertando también una búsqueda de gangas que ha ayudado a recortar las pérdidas, pero estamos lejos del piso”, añadió.