Pages

70

.

Labels

miércoles, 26 de marzo de 2014

RD participará mañana en un tsunami ficticio junto a otros países del Caribe


San Juan (EFE).- Los países del Caribe, así como parte de la costa este de EE.UU. y del Golfo de México, están convocados a participar mañana en un simulacro de tsunami (maremoto), generado por un terremoto ficticio de magnitud 8,5 en la escala de Richter ocurrido en Portugal.

La Oficina Nacional de Meteorología (Onamet) de República Dominicana tiene previsto participar en esta actividad para poner a prueba el flujo de información entre organismos, desde que ocurre el sismo hasta la emisión oportuna de las alertas que permitan activar a las agencias implicadas e informar a la población.

En un comunicado, esa organización detalló que la provincia Puerto Plata será utilizada como piloto para ejercitar la coordinación de los organismos de respuesta.

Con el objetivo de comprobar la capacidad de respuesta de las autoridades locales ante un fenómeno de esas características, el simulacro tendrá lugar a las 10.00 hora de Puerto Rico (14.00 GMT), cuando está previsto que se emitan simulacros de alerta de maremoto en radio y televisión en esta y otras islas caribeñas.

También se dispararán las alarmas en diversas áreas costeras donde se llevará a cabo la prueba, que forma parte del Ejercicio Completo de Tsunami del Atlántico (Lantex, por su sigla en inglés) que se lleva periódicamente.

El Lantex 2014 simulará las consecuencias de un terremoto similar al ocurrido en 1755 en Portugal y su consiguiente tsunami, que afectó a gran parte del Caribe y la región del Atlántico de EE.UU. y Canadá.

Según ese modelo, el terremoto que se simulará el miércoles tendrá una magnitud de 8,5 en la escala Richter con epicentro en la latitud 36,04 grados norte y longitud 10,75 grados oeste con una profundidad de 5 kilómetros.

El Lantex de mañana se llevará a cabo simultáneamente con el Ejercicio de Aviso de Tsunami para el Caribe (conocido como Caribe Wave) y el objetivo fundamental es permitir que cada país compruebe si funcionan sus sistemas de alerta y los protocolos de comunicación entre agencias públicas.

Por ello, además de escuchar alarmas en los países que participen en la iniciativa, lo más probable es que la población no se vea afectada por este simulacro, a no ser que, a nivel local, haya comunidades que quieran probar sus sistemas de evacuación en escuelas y edificios.

El director de la Red Sísmica de Puerto Rico, Víctor Huérfano, señaló a Efe que la importancia del simulacro reside en comprobar la respuesta del organismo que encabeza en el ámbito de las comunicaciones, por lo que se hará un simulacro completo del proceso que seguiría a un maremoto real.

“Hay un riesgo latente de tsunami en el área porque las fallas están ahí”, explicó Huérfano, tras recordar que Puerto Rico se vio afectado por dos maremotos “de gran magnitud” en 1867 y 1918.

Dijo que se quiere probar y confirmar el funcionamiento de los protocolos y sistemas de comunicaciones entre la Red Sísmica, la Agencia Estatal para el Manejo de Emergencias y Administración de Desastres (AEMEAD), el Servicio Nacional de Meteorología de EE.UU. (NOAA) y el Sistema de Alerta de Emergencia (EAS).

El presidente del Comité Estatal de Comunicaciones de Emergencia de Puerto Rico, Alfonso Giménez, señaló que durante los pasados simulacros quedó probado que ese organismo puede alertar a entre un 85 % y un 90 % de la población a través de las emisoras de radio y televisión en un plazo de tiempo de entre dos y cinco minutos.

Dijo que en caso de tsunami la rapidez en la divulgación del mensaje de alerta es fundamental para la seguridad de la población.

Junto con Puerto Rico y las Islas Vírgenes, también están convocados un total de 32 países y territorios de la región del Caribe, que durante los últimos 500 años ha sido azotada por más de 75 maremotos que han causado más de 3.550 muertes, según datos del Programa Caribeño de Alertas de Tsunami.

La directora del Programa Caribeño de Alertas de Tsunami, Christa von Hillebrandt, detalló que el simulacro se incluye dentro del marco de referencia de la Unesco y su Sistema de Alerta de Tsunamis y Otras Amenazas Costeras para el Caribe y Región Adyacente. EFE