El programa contiene una serie de medidas de tipo judicial y administrativo destinadas a brindar mayor protección a las víctimas de maltrato en el hogar, sean de tipo físico o sexual.
De acuerdo con datos publicados por el Instituto Nacional de Estadísticas y Estudios Económicos, entre 2011 y 2012 alrededor de dos millones 200 mil personas de 18 a 75 años fueron objeto de agresiones por parte de sus parejas, exparejas o familiares.
La mayor parte de los abusos fueron cometidos contra las mujeres, pero menos de un tercio, el 28 por ciento, acudieron ante la policía y de éstas sólo una de cada seis decidió poner una demanda judicial, precisa el estudio.
El plan elaborado por Vallaud-Belkacen establece que aún cuando una fémina renuncie a presentar una querella, las autoridades correspondientes deben continuar la investigación del caso y hacer visitas sorpresivas a la vivienda donde ocurrieron los hechos.
La mayor parte de las muertes por violencia doméstica estuvieron precedidas por agresiones físicas o verbales cuya intensidad subió de tono con el paso del tiempo, señalan especialistas.
Ante esta situación, la cartera de los Derechos de la Mujer propone crear mil 600 plazas de alojamiento de urgencia destinadas a las féminas que deseen abandonar el hogar para escapar al maltrato y no tengan un sitio a donde ir.
También se duplicará el número de trabajadores sociales en las comisarías de policía para acompañar a las víctimas en sus gestiones.
La ministra se propone, asimismo, mejorar la atención en el número de urgencia habilitado para estos casos, que en la actualidad sólo funciona de lunes a sábado y en el 40 por ciento de las llamadas da ocupado o nadie responde.
El programa contra la violencia conyugal tendrá vigencia de 2014 a 2016 y estará dotado de un fondo de 66 millones de euros, el doble del plan anterior.
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