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Los políticos, empresarios y algunas ONGs han “metido al país en un gran problema con el Plan de Regularización”.
Haitianos y haitianas que nunca habían venido a este país, con el “relajo de este plan” se han “colado” y hoy creen que mandan mas y que tienen derecho, queriendo “opacar a los dominicanos”.
En la actualidad, hay incertidumbre por la masiva presencia de esos africanos y el espacio que corresponde a los dominicanos ellas y ellos creen que son suyos.
Muchas gentes en pueblos y campos, donde existe masiva presencia de haitianos están en una especie de “éxtasis y anestesiado” con la mentira y el “chantaje” de que ese “infausto” plan sea prorrogado.
Hay desidia, incertidumbre, sufrimiento feroz y aterrador entre los dominicanos con el “flaco” papel de las autoridades dominicanas con este plan.
Los dominicanos a quienes nos duele el país no nos creemos ser un “pibe ingenuo”, pero tampoco ilusos para no entender las intenciones de este plan.
A esto hay que ponerles el punto a la i y que nunca más vuelva a hacerse un “atolladero” de esa magnitud.
A los ideologos de este "mamotreto" hay decirles que en el pais existen hombres y mujeres a quienes les duele la Patria y están abatidos por la situación presentada.
A los haitianos se les ha creado un mjundo lleno de desilusiones que no canten victoria que aunque a los dominicanos se les ha "traicionado" entre la confusión e incertidumbre hay que decirles que este plan ha fracasado, pero que defenderemos la Patria de los traidores.
No hay peor angustia que esperar a alguien que nunca va a volver y buscar a alguien que no sabes donde está, ni como está, pero los dominicanos tenemos fe y esperanza como dijo Juan Pablo Duarte si el pais cae en manos extranjera, mejor y preferible es, que se hunda la Isla.
De esto continuar así, mañana los dominicanos no tendremos en su país un lugar a donde ir porque los haitianos les han quitado su nacionalidad con la complicidad de los traidores que venden su conciencia por una migaja de dinero.
Los ricos y políticos nos están creado un designio perverso y malvado del destino que se encaprichaba y muchas personas están decaídas, tristes, angustiadas, sin una especie de diagnostico y como que la Soberanía Nacional esta como un paciente en Cuidado Intensivo.
La importación de culturas ha convertido al país en no sociable y divertido como era tiempos atrás.
Los haitianos sin importar el lugar donde estén vuelcan su odio y rencor contra los dominicanos, como se ven en las filas de los lugares donde están las oficinas de ese “infausto plan”.
Desde que esa “desgraciado proyecto” ideado por el gobierno del partido PLD iniciara los cimientos de la sociedad dominicana y el núcleo familiar donde se refugiaban madres, padres e hijos ha quedado desintegrado.
Ya no se pueden regar ni siquiera los coloridos malvones que adornaban las galerías y el jardín de las casas quienes estaban entreverados con rosas que nuestros ancestros cuidaban con tanta dedicación y esmero porque ya ni eso existen.
No solo nos han quitado el espacio, sino que destruyen los árboles secando los ríos y acabando con el preciado y vital recurso para la vida humana como es el agua.
Los haitianos ya nos superados con creces en cantidad a los dominicanos, gracias a los traidores y a las erróneas políticas que en materia migratoria han aplicado los gobernantes.
