Honor por su lucha a favor de la democracia.
Por Marcelo Peralta.
Si el coronel Francisco Alberto Caamaño Deñó tuviera vivo, hoy 11 de junio del 2015 cumpliera 83 años de edad.
Nació el día 11 de junio de 1932 y fusilado 16 de febrero del 1973 en el gobierno de los temibles 12 anos del Presidente Joaquín Balaguer cuando el “foco guerrillero que encabezara en busca de una democracia sin exclusiones”.
Caamaño Deñó fue militar, presidente de la República Dominicana y “Héroe Nacional” y de la guerra de Abril del año 1965 y brazo duro contra la intervención de Estados Unidos, potencia criminal que envió 42 mil marines a masacrar a un pueblo buscando libertad y sosiego.
Aunque yace en el “cenotafio” es y eres el “coronel de Abril” y “Héroe Nacional”.
Al fusilamiento del coronel Caamaño Deñó se vincula al general Ramiro Matos González, anticomunista, autor de persecutor contra la escuadra guerrillera, cómplice de los cánones internacionales, violador de los derechos humanos que impedían asesinar al comandante apresado.
En este complot no podían faltar figuras relevantes de esa brutal determinación, como es el propio ministro Ramón Emilio Jiménez (Milo), el general Beauchamps Javier, el general Enrique Pérez y Pérez y el mayor Rafael Pou Castro.
El último gesto y la mirada de Caamaño Deñó antes de ser quemado y su cuerpo lanzado no se sabe dónde.
La historia registra de que Enrique Pérez y Pérez y el mayor Rafael Pou Castro, junto al general Salvador Lluberes Montás, eran los brazos ejecutores de los crímenes más siniestros de esa época, con estrecha relación con la C Agencia Central de Inteligencia-CIA y la mafia cubana de Miami.
Mucho menos podían estar ausentes oficiales ligados al sicariato, encargados de las vejaciones, a los fusilamientos y la quema del cadáver, los agentes encubiertos de la CIA, encargados de verificar la muerte del coronel de Abril.
Estremece el vil y cobarde fusilamiento de Caamaño Deño al de “lesa humanidad” del 1967 en la Higuera, en Bolivia, contra el comandante Ernesto -Che- Guevara.
En ambos abominables crímenes son varían los protagonistas locales, los jefes militares y de Estado, pero sí tienen el mismo desenlace a tono con el patrón de la Agencia Central de Inteligencia-CIA- de Estados Unidos para ese tipo de situaciones y frente a la clase de líderes como era Caamaño Deño y Che Guevara.
Unidos al proyecto guerrillero Caamaño Deño estaban sus compañeros Ramón Euclides Holguín Marte, Hamlet Hermann Pérez, Mario Nelson Galán, Claudio Caamaño Grullón, Juan Ramón Payero Ulloa, Toribio Peña Jáquez.
Con el fusilamiento del coronel Francisco Alberto Caamaño Deñó, desapareció una de las figuras más importantes de la historia dominicana del siglo XX.
Héroe Nacional que con su arrojo restauró la Soberanía de la República.
Fue una personalidad relevante en la democracia del país, llevando en alto los ideales de los padres de la Patria, Juan Pablo Duarte, Francisco del Rosario Sánchez, Matías Ramón Mella y otros prohombres y mujeres que ofrendaron sus vidas en aras de la Libertad e Independencia, lamentablemente, hoy mancillada por los verdugos”.
Aunque el cuerpo llevado a un “cenotafio”, cuyos huesos no podrían ser los suyos, tras ser fusilado en San José de Ocoa, aun así, conservará por siempre tu legado histórico Don de “Coronel de Abril” y una “gloria”, sin importar que te hayan despojado del rango logrado.
¡El coronel Caamaño Deñó sí tiene quien le escriba.