El lateral derecho ha sido objeto de insultos y amenazas a través de las redes sociales después del partido del viernes por los cuartos de final del Mundial de fútbol de Brasil entre Colombia y el equipo anfitrión.
Cuando faltaba poco para el final del juego, que Brasil ganó por 2-1, Neymar sufrió la fractura de una vértebra lumbar por un rodillazo de Zúñiga.
La selección regresó a Bogotá el domingo, donde fue recibida por más de 100.000 aficionados que le tributaron un homenaje en el parque más grande de la capital, pues nunca antes Colombia había llegado hasta los cuartos de final en un Mundial.
Los jugadores se desplazaron hacia sus ciudades tras el homenaje, y Zúñiga llegó acompañado de unos diez policías al municipio de Chigorodó, en el departamento de Antioquia (noroeste).
Según el coronel Raúl Riaño, comandante de la Policía Nacional en la región de Urabá, los uniformados se encargarán de custodiar al jugador del Napoli italiano mientras se encuentre en Colombia.
El director de la Policía Nacional, general Rodolfo Palomino, ya había anticipado antes del regreso de la selección al país que los jugadores tendrían un esquema de seguridad en vista de la euforia por su actuación en el Mundial de Brasil.
“Los jugadores disponen de protección en cualquier lugar del país. Existe el fervor de los aficionados que deliran por estos excepcionales seres y esto nos obliga a estar muy atentos”, dijo el oficial.
Zúñiga ha asegurado que nunca tuvo la intención de lastimar a Neymar y antes de viajar a Colombia envió una carta al jugador del Barcelona para desearle una pronta recuperación.
Posteriormente, el comité de disciplina de la FIFA descartó una sanción para el colombiano.
En vista de las amenazas e insultos que recibió Zúñiga en las redes sociales, especialmente provenientes de Brasil, el gobierno colombiano pidió el lunes a las autoridades de Italia que preserven la seguridad del lateral derecho cuando el jugador regrese al país europeo.
Fuente: noticias24.com