Desbarata totalmente los trombos que se nos forman en las arterias y así evitan los tumores que aunque puedan ser benignos, también podrían devenir en malignos.
Al desbaratar estos trombos, pues, esto nos asegura una buena circulación y la sangre va directamente al cerebro y éste la envía al corazón, para evitar, como es natural, los ataques al corazón por falta oxigeno y también los derrames cerebrales.
A consumir remolacha con melaza o miel de abejas, pues.
¿Cómo se prepara? Sencillo:
Tomamos la remolacha y la lavamos bien. Luego cortamos en trocitos o guayamos y exprimimos esta paja y sacamos el rojizo líquido y lo ligamos o licuamos con la melaza o la miel de abeja.
Ciertamente es un trago medio pesado por el dulce empalagante de dulce con dulce, pero no mata, al contrario, ya sabemos las ventajas. Nos tomamos un pozuelo en la mañana y otro al acostarnos y “san se acabó”. Fuera de nosotros los ataques al corazón y los derrames cerebrales.
A consumirlo, pues…
