La gelatina está de moda, ya sea para nuestra salud o para nuestra belleza. Cuida de nuestros dientes, huesos, no dispone de colesterol ni de grasas y combina con gran cantidad de platos. Es sabrosa y gusta a grandes y pequeños, pero ¿Sabías que es también una maravillosa aliada para cuidar de tus articulaciones?
Beneficios de la gelatina para nuestras articulaciones
La gelatina deriva de la grenetina. En nuestro paladar pasa casi desapercibida, pero nos aporta una sensación de frescura tan fácil de digerir como de comer. Y eso sí, los beneficios que nos transmite son innumerables.
Lo más destacable es que la gelatina, es básicamente una proteína pura que se obtiene al extraer y procesar el colágeno de la piel y tejido óseo de origen animal. Contiene 90% de proteínas, 2% de sales minerales y el resto es agua.
La gelatina, se alza como un modo terapéutico muy acertado para cuidar y restaurar de nuestras articulaciones, gracias a su facultad para sintetizar el colágeno en el organismo. Además y gracias a ello, nos permite fortalecer nuestras uñas, nuestro cabello y nuestros dientes. Su cantidad adecuada en flúor nos permite, por su parte, cuidar de nuestro esmalte evitando la aparición de caries. Sencillamente magnífico.
La gelatina, cuida también de los trastornos del tejido conjuntivo como la artrosis, reduciendo la inflamación, sobre todo por su facultad para regenerar el cartílago de las articulaciones.
Este alimento dispone además de un aminoácido conocido como “lisina”, que fortalece nuestros músculos.
Tal vez te sorprenda, pero la gelatina está reconocida por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como un alimento con la misma importancia y salubridad que el pan.
Dispone además de unas propiedades ideales para la prevención y el tratamiento de la osteoporosis.