(REUTERS) El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, sancionó una ley que penaliza a los conductores en estado de ebriedad y dijo que espera que la norma entre en vigor este fin de semana.
“Teniendo en cuenta las festividades de Navidad y Año Nuevo, estoy dando instrucciones al Ministerio de Transporte y a la Policía Nacional, general Palomino, para que obren con toda la celeridad y con toda la eficacia, de forma que las medidas se apliquen desde este mismo fin de semana”, agregó Santos.
El mandatario explicó que el mensaje al país debe ser claro y contundente. “No más borrachos en las vías, no más víctimas del cóctel criminal del alcohol y la gasolina”, enfatizó Santos. Y agregó que no se puede seguir permitiendo que personas bajo los efectos del alcohol “cojan un carro y les quiten la vida a otros”.
“No es posible que cada día, que cada noche, tengamos víctimas heridas o fatales cuyo único pecado es estar en una vía pública”, precisó el presidente de Colombia.
Santos recalcó que la ley contiene sanciones penales y administrativas, dependiendo del grado de alcohol y de la reincidencia. “En el caso por conducción y homicidio en estado de alcohol, la pena aumenta de dos terceras partes al doble, y puede llegar hasta 18 años de cárcel”.
Resaltó que las multas por manejar ebrio van de más de u$s875 hasta u$s14 mil. Y hay multas por reincidencia: “Si un conductor es descubierto por segunda vez manejando ebrio, tiene que pagar el 15% del valor comercial del vehículo que esté manejando”.
“También se inmovilizará el vehículo y habrá suspensión de la licencia de conducción, que puede ser de uno a diez años o, incluso, en forma definitiva. Los conductores ebrios, además, deberán resarcir a la sociedad con obras sociales”, afirmó Santos y sentenció: “Cero tolerancia a la mezcla de alcohol y conducción”.
