Y lo peor aún, es que casi todas las editoras cambiaron las series de los libros, lo cual obliga a los usuarios a comprar los nuevos textos.Dueños de librerías radicados en esta ciudad también informaron que las ventas se mantienen muy bajas respecto a otros años.
“Caballero, la gente quiere comprar, pero vienen aquí y dicen que no tienen dinero”, fue una de las expresiones de Daniel Rosario, de la librería Espartaco, de la calle San Luis. Indicó que muchas personas van con libros usados para que se los reciban, pero al cambiar las series, ese trueque ya no se puede hacer.
Asimismo, dijo que un gran porcentaje de los clientes procuran libros usados. Dijo que una familia con varios estudiantes, fácilmente tiene que buscar entre 30 o 40 mil pesos para poder comprar los libros, mascotas, lápices, lapiceros y otros utensilios escolares.
Teresa Ventura declaró que tiene un niño que va a octavo curso de la primaria y tiene que disponer de 10 mil pesos solo para los libros. “Lo lamentable de esto es que no hay con quién quejarse”, puntualizó Ventura.
Mientras que Juan Sánchez informó que por dos hijos que van para el bachillerato, tiene que buscar 48 mil pesos para comprar los libros, ya que el más barato de todos cuesta mil 155 pesos, pero luego todos son de mil 800, 2 mil y 2 mil 500 pesos.